martes, 2 de enero de 2024

Ya se perciben los frutos de «Fiducia supplicans»

San Bernardino de Siena
 en el oscuro siglo XV

     Un político estadounidense, que fue gobernador de Nueva Jersey e intenta meter la cabeza en las elecciones presidenciales, un tal Chris Christie del que no recuerdo haber oído hablar pero que dice ser católico, educado en la creencia de que el matrimonio es entre un hombre y una mujer, declara haber visto la luz gracias a «Fiducia supplicans» y ser ahora partidario del matrimonio homosexual.
     Tucho y Bergoglio afirman que no se ha modificado la doctrina sobre el matrimonio, pero no todos lo ven así; al menos Chris Christie ha encontrado un motivo para cambiar sus creencias o, quizás, estaba buscando una oportunidad de congraciarse con el Mundo y los dos descerebrados del Vaticano se la dieron.
San Bernardino de Siena adoc-
trinado por Tucho y Bergoglio
     A lo largo de la historia, los herejes y sus disparates han dado ocasión (Dios escribe derecho con renglones torcidos) para que la Iglesia reafirmase su fe profundizando en su estudio y formulándola con mayor precisión. Quizás esto acabe ocurriendo con la doctrina sobre bendiciones y sacramentales, o con el matrimonio y las uniones indecorosas, de las que ni debería dársenos motivo para hablar; pero es difícil que esta generación lo vea.
     He pasado la mayor parte de mi vida sin tener que preocuparme ni hablar de uniones entre personas del mismo sexo y ahora, cuando tenemos un patrimonio doctrinal depurado durante siglos expresado con máxima claridad en el Catecismo de la Iglesia Católica y algunas declaraciones vaticanas –de cuando la población del Vaticano era más católica que ahora-, por culpa de unos hijos de Satanás tengo que andar reafirmando la fe sobre estos temas.