Otro que no dobla la rodilla ante Baal

Baal...

     La situación actual de la Iglesia y del mundo es desesperanzadora, tanta herejía y traición en el interior de la Iglesia, un mundo tan entregado al mal, pero aunque todo parece de lo más sombrío la realidad es bastante mejor. El profeta Elías andaba, en 1Re 19, muy pesimista “los hijos de Israel han abandonado tu alianza, derribado tus altares y pasado a espada a tus profetas; quedo yo solo y buscan mi vida para arrebatármela”. Pero Dios veía las cosas de otra manera: no todo estaba tan mal, Elías no estaba tan solo “Dejaré un resto de siete mil en Israel: todas las rodillas que no se doblaron ante Baal y todas las bocas que no lo besaron”.
     La lamentable propuesta de convalidación del adulterio por parte del Cardenal Kasper ha suscitado la respuesta de los que no se arrodillan ante los ídolos de nuestro tiempo. Otro más ha sido el profesor de pastoral familiar en el Instituto Juan Pablo II en la Universidad Lateranense, Juan José Pérez Soba, que ha ofrecido una entrevista sobre el tema difundida por la Agencia Zenit que puede encontrarse en http://www.zenit.org/es/articles/las-expectativas-del-sinodo-de-la-familia

y más Baal.

     El profesor Pérez Soba dice “Hubo una relación de Kasper en el consistorio y me parece desenfocada en el sentido de que está centrada solamente en un tema; el tema de los divorciados y vueltos a casar, que ocupa más del 30 por ciento de la relación. Y que su propuesta se ha de valorar negativamente.” Entonces el entrevistador trata de echar un capote al Cardenal pero el Profesor eleva la apuesta “Creo que la valoración en su conjunto ha de ser negativa, en el sentido de que presentó una propuesta que ya había sido presentada en el año 1978, cuando el teólogo Kasper escribe un libro sobre la familia, propuesta que fue rechazada por el magisterio dos veces...” Y en varias preguntas más desgrana los errores e inconsistencia intelectual y doctrinal de Kasper y la vigencia de doctrinas como la de la Familiaris Consortio.
     A la vista de las reacciones que la relación del Cardenal Kasper ha suscitado veo con gran optimismo los resultados del próximo Sínodo y ningún peligro.